domingo, 15 de febrero de 2015

Nosotros, los Dogon

Es un lago sagrado, porque en el momento más agobiante de la sequía conserva un poco de agua, un poco de vida. Entonces los Dogon de todas las aldeas nos juntamos para un rito que nos va a garantizar el bienestar y la abundancia el año que viene: tenemos que capturar un pescado, al menos uno, y nuestro pueblo, nuestra familia y nosotros mismos estaremos salvados.

Aprendan, blancos ignaros, que no pueden ir a un recital ni a un partido sin que haya disturbios. Mírennos a nosotros, los Dogon, cuando el agua y los peces escasean, buscando nuestro alimento de hoy y de mañana sin un empujón, sin un codazo, en armonía con la naturaleza esquiva y con nosotros mismos. Luego, pueden volver a llamarnos salvajes...